Ningún cristiano comprenderá jamás totalmente el grado hasta el cual Cristo hizo provisión para él. Mientras vivamos en este mundo, nuestra compresión de las cosas celestiales será limitada. Pero si pudiéramos echar un vistazo a lo que Dios tiene reservado para nosotros en el futuro, nuestro deseo de tener una vida de santidad se volvería enormemente más intenso.

En este mensaje, el Dr. Stanley dice que los creyentes son aceptados totalmente por Dios. Gracias a esta aceptación, podemos esperar con optimismo estar de pie con Cristo delante del mundo cuando Él se revele en toda su gloria. Dios no se avergüenza de nosotros, y Él nos dará la grandiosa bendición de reconocernos como sus hijos e hijas en Cristo frente a todo el universo.

Esta comprensión de la aceptación total de Dios, debe influenciar todos los aspectos de nuestra vida. Saber cuán preciosos somos para Dios, es asombroso y una lección de humildad al mismo tiempo. Aprenda a vivir hoy como un hijo de Dios valioso.

Este mensaje es parte de la serie “Completos en Cristo: Estudio sobre Colosenses, Vol.3”.